El ser humano por lo general tiene activa su mente y emociones continuamente; pasamos pensando en situaciones cotidianas, proyectos, problemas y conflictos por resolver. Los conflictos son aquellos asuntos en los que más gastamos tiempo, energía física, emocional y espiritual.

Es por esto que vamos a conocer e identificar 30 debilidades del ser humano, típicas con las que perdemos más energía y esfuerzos de los necesarios. Contribuyen a situaciones que nos producen verdaderos dolores de cabeza y en muchos casos hacen que se aumenten innecesariamente los problemas y nos encadenan emocional y espiritualmente.
En aquel día—afirma el SEÑOR Todopoderoso—, quebraré el yugo que llevas sobre tu cuello y romperé sus ataduras, …
Jeremías 30:8
Comencemos por definir que es una Debilidad: Las debilidades son rasgos o aspectos de una persona considerados negativos por la sociedad y la familia. Reconocer nuestras debilidades es una expresión de carácter, significa que estamos siendo conscientes de que podemos mejorar y trabajar en ellas para convertirlas en fortalezas.
Los conflictos son aquellos asuntos en los que más gastamos tiempo, energía física, emocional y espiritual.
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Importancia de reconocer nuestras debilidades: Es posible que si te pido que identifiques tus debilidades no sepas cuáles son, no es muy común que los seres humanos dediquemos tiempo a identificar nuestros rasgos negativos, lamentablemente.
¡Comencemos!
1 Egoísmo. El egoísmo implica pensar en el beneficio propio por encima del bien común. ¿Qué hacer? Reconocer la importancia del otro y comenzar a pensar un poco más en el entorno cercano antes de llevar a cabo un acto egoísta, pueden ser los primeros pasos para mejorar esta debilidad.
2 Falta de empatía. No tener la capacidad de entender lo que piensan o sienten las otras personas es una debilidad muy común. ¿Qué hacer? Hacer el esfuerzo por comprender la situación del otro, incluso aunque no nos afecte o nos incumba, es una forma de cultivar la empatía.
3 Soberbia. La soberbia es una sensación de superioridad que impide que la persona sea capaz de reconocer sus propios errores y de ver a otros como iguales. ¿Qué hacer? Cultivar la humildad y entender que existen otros puntos de vista, puede ayudar a mejorar esta debilidad.

4 Envidia. Es una debilidad caracterizada por la insatisfacción que genera no tener lo que otros tienen, bien sea en términos materiales (dinero, empleo, estabilidad) o afectivos (pareja, familia, vínculos saludables).¿Qué hacer? Entender que es posible tener lo que deseamos si trazamos un plan de acción y trabajamos por ello, es una forma de darle menos espacio a está debilidad en nuestra vida.
5 Hipocresía. La hipocresía es el ocultamiento de las verdaderas intenciones. La persona hipócrita puede ejecutar una acción alegando un propósito, cuando en realidad lo está haciendo con otra motivación. ¿Qué hacer? Cuestionarnos el valor de nuestras verdaderas intenciones y sus posibles consecuencias puede ayudarnos a dar un paso atrás antes de alimentar esta debilidad.
Conocernos a nosotros mismos nos ayudará a detectar los conflictos y resolverlos con mayor facilidad; además es necesario evaluar qué tanto podemos manejarlos y resolverlos o qué tanto somos quienes los provocan.
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6 Apatía. La apatía es la falta de entusiasmo. Es una debilidad de las personas que no tienen un propósito vital, por lo cual nada les interesa puesto que sienten que no tienen objetivos que cumplir. ¿Qué hacer? Comenzar a indagar sobre lo que realmente nos gusta y atrevernos a experimentar cosas nuevas pueden ser recursos para enfrentar la apatía.
7 Timidez. La timidez es el miedo al juicio social. Aunque se suele asociar la timidez con la introversión, en realidad se trata de dos cosas distintas. La introversión es un rasgo de la personalidad mientras que la timidez es una debilidad personal. ¿Qué hacer? Cultivar la autoestima y fortalecer la creencia de nuestro aporte al mundo son formas de lidiar con la timidez.
8 Hipocresía. La hipocresía es el ocultamiento de las verdaderas intenciones. La persona hipócrita puede ejecutar una acción alegando un propósito, cuando en realidad lo está haciendo con otra motivación. ¿Qué hacer? Cuestionarnos el valor de nuestras verdaderas intenciones y sus posibles consecuencias puede ayudarnos a dar un paso atrás antes de actuar con hipocresía.

9 Irresponsabilidad. Se refiere a la debilidad personal para encarar un asunto. El sujeto irresponsable no tiene la voluntad para hacer una tarea, pero tampoco asume las consecuencias que esto puede generar. ¿Qué hacer? Hacernos responsables por las consecuencias de nuestros actos es una muestra de madurez y evolución personal.
10 Desconfianza. La desconfianza es la creencia de que las demás personas nos van a fallar, o de que las circunstancias no serán favorables para el logro de un objetivo. ¿Qué hacer? Aprender a soltar el control propio y sobre los demás, confiando en que cada persona está haciendo lo mejor que puede es el inicio para recobrar la confianza.
Comienza a revisar e Identifica tus propias debilidades.
Continúa…